La ajada es ideal para salsear sobre todo el pescado
cocido... bacalao, rape, merluza, etc... También se utiliza para salsear platos
de verduras o para aliñar ensaladas y así hacerlas menos aburridas. Esta receta es ideal
para comer todas las épocas del año, aunque preferiblemente yo lo suelo comer
en invierno.
Ingredientes:
½ escarola
Sal
Vinagre
Béicon o jamón (opcional)
Picatostes de pan frito (opcional)
Ajada:
100 ml de aceite de oliva.
Béicon o jamón (opcional)
Picatostes de pan frito (opcional)
Ajada:
100 ml de aceite de oliva.
3 dientes de ajo.
2 cucharaditas de pimentón dulce.
Preparación de la ajada
Cortamos los ajos en láminas
y los freímos en el aceite hasta que queden ligeramente dorados.
Cuando ya estén dorados, apartamos la sartén del fuego,
dejando que pierda un poco de temperatura, y añadimos el pimentón. Removemos y dejamos reposar.
El hecho de dejarla reposar, es con el fin de que el
pimentón se vaya hacia el fondo, y nos quede una ajada limpia.
Cortamos y lavamos la escarola, la escurrimos y la ponemos en una fuente o bol.
Aliñamos con sal y vinagre al gusto y removemos. A continuación y para acabar
el plato añadimos la ajada antes de que se nos enfríe del todo y volvemos a
remover todo bien.
Y listo para comer. Podéis añadir tostones de pan frito o también
tiritas de beicon o de jamón frito.
También se puede "jugar" con el pimentón, haciendo
una mezcla de dulce y picante, todo según gustos.